La criatura crece...

Escribo esto cuando apenas han pasado unas horas de la quedada del 5-N en Barcelona… la primera que celebramos en el club X-Man en lugar de en una habitación de hotel.

Es un momento de cambio… de repensar el concepto… de observar que la criatura crece y de sufrir en silencio (en mi caso) pensando hacia donde evolucionará… preocupado por preservar aquello que para mí es esencial en mi concepto de este grupo y aquello que sé que lo hace especial y distinto.

Este post va de todo eso… Vamos a ello !

EL TAMAÑO IMPORTA

Odio esta frase… pero no me refiero a aquello a lo que habitualmente se refieren quienes la pronuncian… Me refiero al tamaño del grupo y de nuestras quedadas.

Nuestro grupo se creó en diciembre de 2018 y en febrero de 2019 tuvimos nuestra primera quedada en grupo… Éramos 25 en el grupo y asistimos 10 a la quedada.

Tras un parón del grupo desde marzo a julio (por problemas familiares del administrador), en agosto reactivé la promoción del grupo y en pocos días éramos 50… y recuerdo que me fijé el objetivo de llegar a 100 miembros antes de finalizar 2019… A primeros de noviembre ya somos 114… esto es una locura !! … Una locura encantadora… Es la extraña sensación de que una idea loca -que no recuerdo ni cómo surgió- acaba materializándose en una realidad exitosa que no deja de crecer delante de tus ojos y que a veces te desborda.

Gestionar el grupo es complicado y cada vez lo será mas…

La próxima semana me voy a Madrid a la primera quedada allí… donde hay muchas ganas de empezar las quedadas… y –convencido de que será un éxito- pronostico que en breve tendremos allí otro núcleo importante de actividad del grupo.

En Tarragona también tuvimos ya una quedada y tenemos un núcleo importante que también puede interactuar con el de Barcelona por proximidad.

En Galicia la cosa también se está moviendo y estamos planeando la primera quedada allí…

En Tenerife hay más ganas que metros de isla ;)

Y nos quedan muchas zonas del país donde promover el grupo y hacerlo crecer.

La criatura crece… y su buque insignia (las quedadas grupales) también.

Y no es lo mismo gestionar una quedada de 8-10 personas apiñadas en una habitación de hotel que una quedada de 15-20 personas en un club o espacio para sexo en grupo… El tamaño –en este caso- sí importa…

DEL HOTEL AL CLUB

Ha sido curioso comentar con algunos de vosotros (de los que asistieron a quedadas anteriores en hotel) lo distinto de la experiencia en club.

El 5-N en el club X-Man fuimos 13 personas, frente a las 8-10 de las quedadas anteriores en hotel… 

El número de asistentes no era mucho mayor, pero la experiencia fue muy distinta.

De la calidez de las sábanas, la moqueta y el aire acondicionado del hotel pasamos al cuero rojo, paredes negras y sudor en el X-Man.

El entorno del club multiplica el morbo y hace la experiencia completamente distinta.

Dejamos –por fin- de sufrir por como entrar y salir discretamente del hotel para acceder con libertad a un espacio concebido para el sexo en grupo.

Dejamos –por fin- de sufrir por no hacer ruido para que no nos oigan en la habitación de al lado para poder expresarnos con libertad, gemir y gritar de placer.

Pero un espacio mayor y con más gente lo hace todo más difícil de gestionar y de controlar y –algunos ya me conocéis- mi mayor virtud es mi capacidad de organización para tenerlo todo bajo control y mi mayor defecto la necesidad patológica de controlar la situación (especialmente en los eventos que organizo).

EL FORMATO

En el club X-Man dispusimos de una colchoneta con espacio para 3 receptores con 2 masturbadores por cada uno de ellos… espacio central pues para 9 personas en total… Por los laterales hay bancos-repisa con colchoneta y un sofá…   En los espacios anexos hay slings, una mazmorra, una cruz de San Andrés y varios espacios más…

Acostumbrado al concepto-hotel intenté centrar la actividad en el espacio principal de la colchoneta central para estar todos juntos… pero seguro que con más gente deberemos abrir el espacio y pensar en colgar a la gente en vertical, usar los slings, etc…

Algunos os reísteis mucho cuando os compartí un gráfico explicativo del modo en que tenía previsto organizar las rotaciones en la quedada del 5-N.

Cuando os lo intenté explicar “in situ” algunos pensaríais que estoy loco… Afortunadamente para vosotros y para mí se hizo del todo innecesario aplicar el modelo matemático de rotaciones que tenía previsto y todo fluyó de forma espontánea… tal vez porque éramos sólo 13… pero con 20-25 (cifra óptima para amortizar el coste del local) la cosa se puede complicar…

Un sonido de “sirena de barco” y un temporizador nos avisaban cada 8 minutos de que tocaba cambiar de lugar e iniciar una nueva rotación… algo que -más allá de lo cómico de la metodología- era un recordatorio permanente para nuestro cerebro de que estábamos allá para una experiencia en grupo.

Pero mi obsesión por las rotaciones en las quedadas tiene una seria justificación ya que con ellas pretendo garantizar que todos interactuemos con todos, que nadie se sienta desplazado y que esta sea una experiencia sexual en grupo y no una suma de experiencias en pareja.

NO SOMOS COMO LOS DEMAS

Cuando digo que no hay otro grupo como el nuestro lo digo con total convencimiento.

Locales de sexo en grupo hay muchos… En el X-Man, sin ir más lejos, se organizan orgías todos los miércoles y los domingos…

Pero hay muchos modos de entender el “sexo en grupo”… Algunos lo confunden con tener “sexo en público”… y es obvio que no es lo mismo.

En una sauna la gente se enrolla encerrada en una cabina…En muchas llamadas “orgías” o encuentros de “sexo en grupo” lo que ocurre es que la gente se enrolla en grupos de 2-3-4 personas a la vista de los demás… Pero la interacción física (no así la visual) se limita a esas 2-3-4 personas con quien se produce un intenso contacto.

Cuando concebí el grupo y sus quedadas no estaba pensando en ellas como una serie de 1-a-1 en paralelo y en espacio común y abierto… pensaba mas bien en algo que se refleja muy bien en una foto que me encanta y que extraje de un momento muy espontaneo que se produjo en una de nuestras quedadas.

LO ESENCIAL

Para mí hay cinco cosas esenciales que hacen especial nuestro grupo y nuestras quedadas y que de ningún modo querría perder: el buen rollo, la generosidad, la entrega, la socialización y la tolerancia.

El buen rollo se consigue gracias a la actitud… y la actitud se trae puesta de casa, pero se refuerza con la interacción.

La generosidad es un don de muchos de vosotros… y es lo que hace que un encuentro de sexo en grupo funcione… cuando las personas ponen su atractivo, su experiencia o su habilidad a disposición de todo el grupo.

La entrega ayuda a superar barreras y bloqueos… asistir a los encuentros con mente abierta –aunque con nervios- y ver como el grupo te acoge y te transporta a un entorno de confianza y a la vez morboso es algo muy especial para los nuevos… y para el resto también es muy especial participar en la primera experiencia de alguien y ayudarle a superar sus miedos y sus barreras.

La socialización de la experiencia de la masturbación es uno de los objetivos de este grupo… y a mayor interacción mayor socialización y mayor liberación.

Y, para acabar, la tolerancia… En el grupo hay personas muy distintas y ya sabéis que en las quedadas en grupo no se escoge pareja… Por eso la capacidad de interactuar con todo tipo de fisiologías es un requisito y una virtud que espero siempre de las personas que asisten a nuestros encuentros, aunque siempre queda la duda de si un nuevo asistente tendrá esa capacidad… Y de ahí mi obsesión por garantizar un entorno en que esa máxima sea cumplida a rajatabla.

No quisiera de ningún modo que ninguno de estos elementos para mi esenciales se perdieran al crecer el grupo o al mutar la forma de organizar las quedadas o su formato.

AYUDA !!

Para acabar…

El grupo crece y amplía localizaciones.

Desde ya ruego vuestra ayuda, especialmente en provincias fuera de Catalunya (donde resido), para disponer de grupos de coordinación provinciales que permitan que el grupo funcione de manera autónoma en cada zona.

Esto requiere de la implicación de algunos de vosotros, aunque contaréis con todo mi apoyo.

Y, ahora sí acabo, gracias a todos por ser como sois.